rechazan
febrero 01, 2016
Rechazan campaña contra el divorcio y el aborto
La
empresa Promedios Barcelona, que vende publicidad en buses, decidió no
aceptar aquellos anuncios que provoquen “controversia social”, ya que
los buses no son el soporte más adecuado, además esta propaganda es de
escasa rentabilidad económica, sin embargo la empresa aceptará campañas
políticas, pero no el debate de ideas.
El
transporte metropolitano de Barcelona rechazó prestar su soporte
publicitario para una campaña de una organización católica en contra del
divorcio. La empresa Promedios, que hace publicidad en buses, decidió
no aceptar anuncios que provoquen “controversia social”.
El
grupo católico E-cristians es el promotor de esta campaña contra el
divorcio y el aborto, pero no se difundirá por las calles de Barcelona.
Josep Miró i Ardèvol, dirigente del colectivo, se quejó de la “censura”
ante su publicidad.
“Los
autobuses no están para provocar polémicas sociales, sino para campañas
comerciales”, dice el portavoz de Promedios que rechaza la campaña por
varias razones: Se entiende que E-cristians busca sus soportes
publicitarios para promover debate social. Los autobuses no son el
soporte más adecuado para polémicas. Estos anunciantes suponen escasa
rentabilidad económica, ya que la contratación se limita a un reducido
número de buses.
El
anuncio que pretendía mostrar E-cristians reproduce la imagen de dos
jóvenes y señala que se han amado pero ahora han roto por diversos
problemas, se les invita a reflexionar bajo el lema “Mucho en común” y
se les ofrece una dirección electrónica donde aprenderán a superar sus
problemas.
NO RELIGIÓN, SÍ POLÍTICA
La
empresa señala que piensa aceptar sólo las campañas comerciales, aunque
admitirá anuncios que exhiban instituciones, como el Ayuntamiento de
Barcelona, o partidos políticos. Promedios aceptará campañas de
anunciantes comerciales respeto a productos y servicios de consumo.
Miró
i Ardèvol dijo que es una contradicción: “Se acepta la promoción del
consumo puro y duro, pero no el debate de ideas. El líder Ardèvol señala
que da la impresión que se pretende una publicidad como si sólo el
poder político tiene derecho a difundir sus mensajes. La campaña
rechazada en Barcelona la asumió la empresa de transportes de Madrid. Un
único bus de la línea 127 llevará el anuncio del 23 de noviembre hasta
el 23 de diciembre.
Fuente: El País.com