Al menos 23 personas murieron en el acontecimiento y unas 60 resultaron heridas de diversa consideración en el este de Nepal, al desplomarse por completo un monumento protestante durante un encuentro religioso, indicó este pasado miércoles el Ministerio del Interior de ese país.
Desde este pasado lunes 1.500 fieles protestantes se habían juntado en la capital de Dharan (a unos 300 Km. de la capital nepalí, Katmandú) para una conversación anual evangélica. Acudían desde flamantes sitios para el encuentro anual de la junta cristiana El Sadai.
Además de nepalíes, gran parte de los atestados fieles que participaban en la convención anual eran natales de la India, indicó la policía. Los cristianos son minoritarios en Nepal, un estado en el que predomina considerablemente la dogma hindú.
La Tragedia El relato ha existido la alba del pasado miércoles. Al menos 23 personas han muerto y 63 han terminado heridas afectadas del derrumbe del domicilio del bloque de tres plantas, que contenía el templo en la apostura baja, y un dormitorio femenino abarrotado y emplazado en la gallardía entrada.
Algunos de los fieles dormían y otros se preparaban para acostar cuando el final de la planta superior cedió y cayó sobre todos ellos, según ha publicado el oficial de Policía Bharat Thapa, flagrante en el enclave de los eventos.
Entre los 23 muertos hay 18 compañeras y dos niños, según la misma fuente, que ha definido que todos los difuntos se encontraban en la gallardía baja. “además del apilamiento, la precipitación que cayó durante todo el trayecto hizo que aumentara el peso del techo del dormitorio” que era de paja, dijo uno de los reguladores del evento, Moses Rai, todavía en el pueblo del suceso. “la red no pudo aguantar el peso de la gente al que se añadió el de la precipitación en el hueco de paja”, añadió Rai.
El bloque había sido urbanizado con bambúes, y pensado especialmente para encontrar acogida a las matronas que asistieran a la audiencia. Equipos de socorristas, apoyados por el Ejército, acudieron al motivo para amparar a las damnificadas.
Las alrededor 60 personas que resultaron heridas fueron distribuidas a desiguales hospitales de la capital. Estos accidentes son comunes en Nepal, adonde las ordenanzas de inmovilidad son desconocidas muy a menudo. “además del apilamiento, la tromba que cayó durante todo el plazo hizo que aumentara el peso del aposento del dormitorio” que era de hojarasca, dijo uno de los reformadores del movimiento, Moses Rai, aún en el enclave del caso.
“La organización no pudo sobrellevar el peso de la gente al que se añadió el de la copia en el ponedero de paja”, añadió Rai.
El inmueble había sido edificado con bambúes, y pensado especialmente para sacudir acogida a las compañeras que asistieran a la enseñanza.
Equipos de socorristas, apoyados por el Ejército, acudieron al sitio para proteger a las damnificadas.
Las en torno a 60 habitantes que resultaron heridas fueron distribuidas a flamantes hospitales de la capital. Estos accidentes son corrientes en Nepal, adonde las ordenanzas de permanencia son desconocidas muy a menudo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario