João Vitor Ota predica la Biblia desde sus 4 años. Actualmente tiene 12 años y estudia teología e interpretación bíblica una vez a la semana. Durante una entrevista cuenta sobre su vida y su ministerio.
El pequeño testifica que fue inspirado por sus padres y así Comenzó desde muy pequeño a compartir la palabra de Dios. Cuenta que en su primera predicación ganó dos almas para Cristo.
También compartió experiencias personales cómo la enfermedad sin cura que atravesó su hermana cuando él tenía 5 años de edad. En el momento que se enteró de la noticia él oro por su hermana para que recibiera sanidad, y cuando recibieron los resultados de sus estudios, la enfermedad había desaparecido milagrosamente, algo que era imposible para la medicina.
Continúa compartiendo el testimonio de su hermano mayor que sufrió un paro cardíaco, y volvió a la vida cuando yo no había esperanzas. Él estaba en el hospital cuando todo sucedió, su madre permaneció orando tres veces al día en el baño esperando el interés intervención divina. Por eso El pequeño reafirma qué la fuerza no la han encontrado en el hombre sino en Dios.
João ha señalado que también atravesó situaciones desafiantes y momentos dolorosos pero permaneció haciendo la voluntad de Dios por sobre todo. Recuerda cuando su abuela partió con el señor fue un momento muy duro pero yo le diera fuerza para continuar predicando días después.
Señala que nada de lo que nosotros hagamos por Dios puede pagar lo que él hizo por nosotros. Jesús negó 33 años de su reinado en los cielos para venir a la Tierra y entregarse por nosotros.
El niño predicador dijo que muchas personas no quieren oír a Dios porque su corazón está puesto en las cosas materiales, sin embargo, dejó un mensaje de esperanza diciendo que Jesús Llama a nuestra puerta todos los días pero debemos estar tranquilos porque todo sucederá en el tiempo de Dios.
Fuente Guíame
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