En el estado de Telangana en India, un grupo de 200 personas atacó una iglesia con piedras, ladrillos de hormigón y palos, dejando a 14 personas heridas.
El motivo del ataque fue una disputa entre los vecinos del pueblo, que querían ampliar una calle que invadiría el terreno de la iglesia, donde los cristianos llevaban a cabo una protesta pacífica.
Durante la protesta, hubo una discusión que desencadenó en la multitud atacando violentamente la iglesia hasta romper sus puertas.
En medio de los ataques, una niña resultó herida en la cara, según informó un investigador policial al portal de noticias The Hindu.
La noticia conmocionó a la comunidad cristiana en Telangana, según comentó la colaboradora local Priya Sharma de Portas Abertas, quien reveló que el ataque tuvo lugar el 13 de febrero.
“El ataque a los cristianos es un indicio de persecución. Hay muchos otros lugares de culto en la calle y no están demolidos. ¿Por qué una iglesia debería ser vandalizada y demolida para ensanchar la carretera?”, preguntó.
«Si la iglesia protestara contra la ampliación de la calle, las autoridades podrían haberse movilizado para resolver la situación de manera amistosa», continuó.
Según Sharma, la iglesia ha permanecido en el mismo lugar por décadas.
“Mi gente, que pertenece a la comunidad dalit, fue abusada verbalmente y atacada físicamente con barras y palos de hierro. Tiraron piedras a la iglesia y destruyeron la cruz”, dijo un familiar de una de las víctimas al portal de noticias TNIE.
Para uno de los lideres políticos que visitó el lugar, los culpables son la fracción opositora, “Afirman que la causa del conflicto fue el ensanchamiento de la calle, pero en realidad es pura intolerancia”.
El comisionado de policía implementó el artículo 144 de la ley para prevenir posibles peligros o disturbios en la zona al prohibir la reunión de cuatro personas o más. La policía aseguró la restitución de la calma y comenzó a tomar acciones contra los agresores, resultando en la detención de once personas.
Paulson, un colaborador local de Puertas Abiertas en el sur de la India, expresó que la comunidad cristiana se encuentra consternada por el incidente.
“Consideramos que este estado es seguro para los cristianos en comparación con otras partes del país. Una vez más queda demostrado que no existe un lugar seguro para los cristianos en la India, donde los seguidores de Jesús son a menudo golpeados y gravemente heridos”, concluyó.
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