Según David Garrow, ganador de un Premio Pulitzer, el expresidente escribió la confesión en una carta dirigida a una novia.
El libro titulado Rising Star: The Making of Barack Obama detalló la estrecha relación que Barack Obama mantuvo con Lawrence Goldyn, un profesor que se declaraba abiertamente gay.
Los hechos se dieron en el invierno de 1980 cuando el exmandatario tomó un curso de ciencias políticas en el Occidental College. En ese momento, “Goldyn hizo un gran impacto en Barry Obama”, relató Garrow.
Además, el biógrafo también contó que ellos dos desarrollaron una amistad más allá del aula, y que Obama reconoció que Goldyn fue su profesor favorito durante su primer año de universidad.
En 2008, The Advocate, una importante revista LGBT, le preguntó al expresidente sobre quién había influido más en sus ideas en pro de esa comunidad; la segunda persona que nombró, después de su madre, fue Lawrence Goldyn.
Según Garrow, el profesor contó que Obama no temía ser asociado a él en el aspecto social y que tenía claro que había aprendido de él tanto en el aspecto personal como en clase.
Tres años después de conocer a Goldyn, según cuenta el escritor, el primer presidente afroamericano de EE. UU. le escribió una carta a su novia donde le confesó que él había considerado ser homosexual, “pero en última instancia había decidido que una relación del mismo sexo sería menos desafiante y exigente que desarrollar una con el sexo opuesto”.
El autor de la biografía, David Garrow, ganó un premio Pulitzer por un trabajo sobre Martin Luther King Jr., y es colaborador habitual de ‘The New York Times’ y ‘The Washington Post’.
Fuente: pulzo.com
El libro titulado Rising Star: The Making of Barack Obama detalló la estrecha relación que Barack Obama mantuvo con Lawrence Goldyn, un profesor que se declaraba abiertamente gay.
Los hechos se dieron en el invierno de 1980 cuando el exmandatario tomó un curso de ciencias políticas en el Occidental College. En ese momento, “Goldyn hizo un gran impacto en Barry Obama”, relató Garrow.
Además, el biógrafo también contó que ellos dos desarrollaron una amistad más allá del aula, y que Obama reconoció que Goldyn fue su profesor favorito durante su primer año de universidad.
En 2008, The Advocate, una importante revista LGBT, le preguntó al expresidente sobre quién había influido más en sus ideas en pro de esa comunidad; la segunda persona que nombró, después de su madre, fue Lawrence Goldyn.
Según Garrow, el profesor contó que Obama no temía ser asociado a él en el aspecto social y que tenía claro que había aprendido de él tanto en el aspecto personal como en clase.
Tres años después de conocer a Goldyn, según cuenta el escritor, el primer presidente afroamericano de EE. UU. le escribió una carta a su novia donde le confesó que él había considerado ser homosexual, “pero en última instancia había decidido que una relación del mismo sexo sería menos desafiante y exigente que desarrollar una con el sexo opuesto”.
El autor de la biografía, David Garrow, ganó un premio Pulitzer por un trabajo sobre Martin Luther King Jr., y es colaborador habitual de ‘The New York Times’ y ‘The Washington Post’.
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