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Padre que mató a toda su familia para “salvar sus almas”

 


John List asesinó a toda su familia y rearmó su vida sin remordimientos. Sin embargo, más de una década después de cometer el crimen “casi perfecto”, fue detenido. Detalles escalofriantes.


John List es el protagonista de uno de los crímenes en masa más desgarradores de Estados Unidos. El 9 de noviembre de 1971, el hombre decidió acabar con la vida de toda su familia. Un crimen “casi perfecto” que tardó 18 años en hacerse justicia.


El “Parricida de Westfield” nació en Bay City (Michigan, Estados Unidos) el 17 de septiembre de 1925 y a principios de los años ’50 conoció a su primera esposa, Helen Morris Taylor, una viuda que había perdido a su marido en Corea y vivía cerca de John junto con su hija, Brenda.


Tras el matrimonio, la pareja se mudó al sector de Westfield en Nueva Jersey y luego de casarse tuvieron a Patricia, un año después a John Jr. y dos años después a Frederick.


En los primeros años de la pareja, todo parecía color de rosas. John obtuvo un buen puesto en un banco local, lo que le dio una importante solvencia económica. En ese marco, Helen quiso mudarse a una mansión victoriana llamada Breeze Knoll que contaba con 19 habitaciones y un magnífico salón de baile.


Ahora bien, consciente de que no podría solventar semejante gasto, List le pidió un préstamo a su madre, Alma List, quien decidió ayudar a su hijo a cambio de mudarse con ellos.


Un año más tarde, John perdió su trabajo y todo comenzó a ir cuesta abajo. Helen se hizo alcohólica y adicta a los tranquilizantes. Más tarde List explicó que su esposa sufría de sífilis, una enfermedad que había contraído de su primer marido y que le había transmitido pero que había ocultado por vergüenza y miedo.


En ese marco, el hombre comenzó a planear lo que sería un crimen casi perfecto. En las primeras horas del 9 de noviembre de 1971 John despertó a sus hijos Patricia, de 16 años; John Jr., de 15; y Frederick, de 13 años, para que se ducharan y bajaran a desayunar antes de ir a la escuela.


Una vez que los chicos se fueron, John asesinó a Helen de un tiro en la cabeza. Minutos después asesinó a su madre en su habitación. Finalmente, cuando los hijos volvieron de la escuela, corrieron la misma suerte.


Años más tarde, contó que luego de asesinar a los cinco miembros de su familia, limpió la sangre, se sentó a cenar y se fue a dormir.


A la mañana siguiente, escribió una carta de confesión de cinco páginas a su pastor, recortó su rostro de todas las fotos familiares que había en la mansión, salió por la puerta y cerró con llave. Previamente, avisó al cartero, al lechero, a los profesores de sus hijos y a su jefe que junto a su familia dejarían de urgencia la ciudad por unas semanas, debido a que cuidarían a un familiar que estaba agonizando.


Fue entonces cuando decidió viajar hasta Denver. Allí solicitó una tarjeta de Seguridad Social a nombre de Robert Peter Clark, consiguió un trabajo como cocinero de comida rápida y comenzó su nueva vida.


Finalmente el crimen salió a la luz gracias a los profesores de los niños quienes llamaron a la policía al no saber nada de ellos.


Cuando los efectivos ingresaron a la mansión se encontraron con la trágica escena: una fila de cuerpos en descomposición y la carta de confesión de List, en la que explicaba que había matado a su familia para “salvar sus almas”, ya que tenía algunas preocupaciones sobre el rumbo alejado de lo cristiano que tomaban sus vidas.


La nueva vida de John List


Bajo el nombre de Robert Clark, el autor del crimen rehízo su vida. Se volvió a casar con una mujer llamada Dolores, encontró un trabajo estable como contador y tenía una buena vida.


Sin embargo, en 1989, el programa de televisión America’s Most Wanted (AMW) repasó los crímenes de List para que la audiencia ayude a dar con su paradero.


En ese marco, su creador y conductor pidió al escultor forense Frank Bender que creara un busto de John para que la gente supiera cómo lucía en 1989. Y tuvo éxito: cuando el programa salió al aire, Wanda Flanery y su hija Eva Mitchell descubrieron que se trataba de su vecino  Robert Clark.


Once días después de llamar a la policía, el FBI llegó hasta la casa de Clark en Richmond, Virginia y encontró a uno de los criminales más buscados por la agencia federal. John fue arrestado y acusado de cinco cargos de asesinato en primer grado.


Tras un juicio en su contra iniciado en abril de 1990, casi 19 años después de los asesinatos, el jurado lo declaró culpable de los cinco cargos. Fue sentenciado a cinco cadenas perpetuas consecutivas.


Finalmente, el 21 de marzo de 2008, tras 18 años en prisión, John Emil List falleció a los 82 años producto de complicaciones derivadas de una neumonía.


Fuente: radiomitre.cienradios.com

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