Radio Milagro

La Biblia habla constantemente de los ángeles que hacen la obra de Dios, sin embargo la gente se pregunta si existen.

Una mujer tomo la foto de una figura blanca que subía al cielo con alas y muchos se preguntaban: ¿Que hace aquí? ¿Sera una señal de cosas buenas que vendrán?.

La apariencia del ángel es una señal clara de que las cosas van a mejorar, yo iba en el carro con mi esposo Jeffery cuando un flash inesperado de luz ocurrió, señalo Youlanda Pope Britten, la mujer que tomo la foto.

“Al principio no le di importancia por que en ese momento llovía ligeramente, sin embargo el parpadeo siguió después que la lluvia ceso”, indico a Charisma News.

“Era como una luz con efecto de eco que acaparo mi atención, ya que era un luz que hacia señas, en ese instante le pregunte a mi marido si el estaba viendo lo mismo que yo. El miro un par de veces y me dijo: “Si lo veo ¿pero que eso?”.

No tenia la mas mínima idea, pero seguía parpadeando, así que “Tome una foto”.

Antes de la imagen del ángel Britten estaba pasando por unos retos personales. Sin embargo esa imagen le dio esperanzas. “Creo que fue una confirmación de que todo estará bien, yo había estado orandole al Señor por ayuda en los asuntos cotidianos de la vida. “Porque me preguntaba de que siempre estamos nosotros para los demás, pero cuando necesitamos algo no hay nadie que nos pueda ayudar”.

Erin Potter es un joven que fue sanado por ángeles cuando sufrió de leucemia en el año 2007, sin embargo el cáncer regreso y ahora se esta preparando para un segundo trasplante de médula osea.

Un día, Mientras Potter jugaba con velas luminosas en el jardín su madre le tomo una foto, y se sorprendieron al ver un ángel detrás del niño. Unas semanas después de ser tomada la foto Potter salio victorioso con su trasplante, en la actualidad no tiene cáncer.

Así como la historia de Erin existen muchas mas donde la gente ha sido sanada cuando los ángeles aparecen.

Fuente: Christian Today

ME SOBRAN DEDOS

Por: Baltazar Peña

Ángel se mostraba muy amigo en todo momento —y de hecho creí que lo era—. Mientras se comía mis frijoles, mis tortillas, y se bebía mi sangre; pero a veces un titulo, un buen trabajo, o el dinero, nos hace cambiar. Muchos cambiamos para mal o para bien, y él optó cambiar para mal. —Digo que para mal, aunque quizás el cambio para él fue para bien—. No sé si estoy confundido, porque lo que yo entiendo por bueno y malo, va ligado a mi poco entender y quizá los que estudian más o los egresados de la universidad lo entienden mejor o de otro modo.

Resulta, que Ángel y su servidor —Servidor por cuestión de cortesía, porque a mis amigos los cuento con los dedos de una mano y me sobran más de uno—, crecimos en el mismo barrio, éramos jóvenes, aunque yo menos joven que él, los dos éramos de familia pobre, pero mis padres eran más pobres aún. Él estudiaba el cuarto año de magisterio y yo el quinto cuando tuve que dejar mis estudios. Me fui para la capital, porque mi vida corría peligro —Esa es otra historia que talvez en otra ocasión les cuente—. Dispuse buscar trabajo, no podía estar de haragán siendo carga para mi hermana y su marido. Fueron días muy difíciles, pasé muchas penas para colocarme.

Todas las mañanas compraba el periódico y leía los anuncios de empleo. Me informaba como llegar a ellos, y sin perder tiempo salía corriendo con el saco y la corbata sobre el hombro a tomar la camioneta para ser uno de los primeros en llegar.

—¡Cómo se ha de haber reído la gente al verme vestido de saco rojo!, pero era el único que me prestaba mi cuñado: el otro que tenía lo usaba todos los días—. Mi hermana me daba el dinero para el transporte. Con amor, me preparaba unas tortillas con frijoles para que no pasara hambre y me bendecía antes de salir. Con mi portafolio imaginario lleno de ilusiones me lanzaba en busca del éxito.

Me sentía Incomodo con el cuello apersogado, pues solamente usé saco y corbata para asistir a los bailes de aniversario de mi colegio y los de la feria de Chiquimula, mi pueblo. Pero así lo requerían la mayoría de las “prestigiosas” empresas que publicaban atractivos anuncios para atrapar incautos:

“Por motivos de expansión empresarial estamos contratando personal que llene los siguientes requisitos: Los interesados deberán haber completado, como mínimo, la educación secundaria, tener buenos modales, facilidad de palabra, disponibilidad para viajar, actitud para liderar personal, competencia y responsabilidad (No se requiere experiencia). Los seleccionados recibirán entrenamiento y asesoría profesional. Ofrecemos excelentes ingresos, bonos, viajes y vacaciones. Necesitamos llenar las vacantes de Promotores de instrumentales imperecederos exclusivos del arte culinario.

 ¡Esta es la oportunidad que has estado buscando! (Presentarse de saco y corbata.”

Todos los días me presentaba en las lujosas oficinas de las empresas, unos minutos antes de la hora indicada, y, casi siempre, ya habían varios en espera de ser entrevistados. La atención para todos los aspirantes era excelente, nos hacían sentir importantes. Bellas señoritas nos servían café, galletas y refrescos, mientras éramos llamados al privado del ejecutivo encargado del reclutamiento. 

 Después de unas preguntas pueriles nos informaban que nos darían el resultado al día siguiente. Al final… todos éramos aprobados, pero tenían el cuidado de separarnos en grupos para disimular que el escrutinio en privado era nada más un trámite. Después de tres días y largas horas de pláticas engañosas en las que nos garantizaban el éxito, y mostraban películas de los que habían triunfado en la empresa, sin dar pista de cómo y que habían hecho para logrado, finalmente nos hacían saber lo que sería nuestro trabajo. ¡Vender ollas y sartenes de puerta en puerta! 

 ¡Continuará!

Latifah Smith-Nabengana dice que fue visitada por un “ángel de Dios” en julio de 2015 el cual le dijo que había sido escogida para llevar en su vientre al hijo de Cristo.

“Me dijo que era un Nephilim, como los descritos en la Biblia”, explicó la joven. “Él dijo que tenía un mensaje de Jesús, Él dijo que iba a quedar embarazada, y que iba a dar a luz a un hijo, que sería hijo de Jesús”.

Nephilims son de hecho seres míticos mencionados en el Génesis 6: 4:

“Había gigantes en la tierra en aquellos días, y también después que se llegaron los hijos de Dios a las hijas de los hombres, y les engendraron hijos. Estos fueron los valientes que desde la antigüedad fueron varones de renombre”.

Este tipo de criaturas fueron extinguidas hace miles de años, por lo que su familia se sorprendió ante la afirmación de la joven. Su familia al ser muy religiosa, aceptaron rápidamente el dicho de la joven de 15 años y le brindaron todo su apoyo.

El médico que ha estado siguiendo el embarazo, el Dr. William Franklin Murphy, dice que es consciente de la versión de su paciente, pero dijo que es incapaz de confirmar o invalidar sus aseveraciones.

“Por lo que sé, su embarazo parece normal”, afirma el ginecólogo. “Sus afirmaciones de ‘embarazo Virgen’ son técnicamente ciertas, pero eso no significa que hubo una intervención divina. Le puedo decir que es un niño, pero no hay manera para mí para determinar si es hijo de Jesús hasta que nazca. Si se pide una prueba de ADN en ese momento, entonces podremos decir quién es el padre”.

La afirmación hecha por la adolescente ha provocado una controversia que ha llegado más allá de su comunidad religiosa.

Aunque la mayoría de las personas han mostrado su apoyo a Smith-Nabengana, otros han puesto en marcha campañas en las redes sociales, que van desde decir que fabricó toda la historia hasta que la joven durmió con una criatura demoníaca conocida como íncubo.

Latifah Smith-Nabengana dice que exigirá una prueba de paternidad tan pronto como nazca su hijo para demostrar que ella está diciendo la verdad. Mientras tanto, su historia continuará generando un gran debate y gran controversia en Estados Unidos.

Fuente: Noticias Finales

Tras revisar las decenas de imágenes que había tomado, se dio cuenta que en una de ellas  que parecía ser una figura humana

Se imagina usted estar tomando una foto de un pisaje cualquiera y cuando procede a revisar la imagen registrada se encuentra con algo que capturó el lente de la cámara y que no sabe cómo explicar. Pues eso fue lo que le ocurrió al fotógrafo Richard McComarck, en Estados Unidos.

McComarck se encontraba fotografiando uno de los tributos a los caídos por los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001 y tras revisar las decenas de imágenes que había tomado, se dio cuenta que en una de ellas aparecía, al extremo de un haz de luz, lo que parecía ser una figura humana o angelical  desde el lugar donde estaban las Torres Gemelas (World Trade Center -WTC)

Fuente: lapatilla.com

“¿Las personas malas también tienen un ángel de la guarda?”, preguntó Karla Marie González Mansell, de 11 años, al Papa. La respuesta fue incluida en el libro “Querido Papa Francisco”, que contienen cartas de 30 pequeños de todas partes del mundo en la que le consultan al Sumo Pontífice sobre diversos temas.

“Hice una lista y de repente salió esa. No recuerdo cuáles eran las otras”, rememora González Mansell, estudiante de quinto grado del Colegio Americano, de Managua.

En una de las páginas del libro que recibió la semana pasada como regalo, se ve su fotografía, la carta y el dibujo que envió a Francisco.

La respuesta del Papa argentino fue conmovedora para ella. Le escribió: “Todos tenemos un ángel de la guarda. Una forma de ayudar a los que hacen algo malo es rezar a su ángel de la guarda para que lo ayude a hacer el bien. También podemos rezar a nuestro propio ángel de la guarda para que se haga amigo del ángel de la guarda de la persona que hace algo malo y lo ayude a hacerle razonar”.

    El libro contiene 30 cartas de niños y niñas de 26 países con edades entre 6 y 12 años.

“El año pasado cuando estaba en un campamento de verano, alguien contactó a la profesora y le preguntó si quería mandarle cartas de sus estudiantes al papa Francisco.  Mis compañeros y yo hicimos las cartas, pero solo la mía quedó”, cuenta ella.

La niña capitalina es la única centroamericana que aparece en la publicación.

Fuente: elnuevodiario.com.ni