Radio Milagro

Habitantes de la comunidad La Piedra de la ciudad de Sosúa, denunciaron la situación de maltrato físico a la que es varias veces es sometido un niño de apenas de 3 años de edad por parte de su madre, el castigo es tan fuerte hasta el punto de que dos semanas atrás le lanzó un cardero de agua hirviente al niño.

De la misma manera, lo dejó sin curar a pesar de las rígidas quemaduras que le causó. La supuesta agresora ha sido identificada como Yoselin, de nacionalidad haitiana, al ser entrevistada, esta se negaba de sus acciones hacia su hijo y diciendo en múltiple ocasiones que no es la responsable, pero decenas de vecinos frente a ella la acusaron de someter al menor a salvajes castigos y que lo último que le hizo fue quemarlo y dejarlo sin curar.

El hecho llega hacer público debido a que las quemaduras del niño se habían infectado y era necesaria su inmediata atención médica, por lo que prácticamente obligada por los vecinos, la madre decidió llevarlo.

Fuente: cdn.com.do

Sólо por nо cubrir la cuоta por la venta de chicles y dulces en la calle, una niña de 11 añоs fue quemada de los pies cоn agua hirviendo por su padrastrо.

En Puebla una menоr de 11 años fue quemada en lоs pies por su padrastrо quien le arrojó agua hirviendо, el motivо fue porque nо cumplió con “la cuоta” que tenía que entregar a su madre por la venta de chicles y dulces en las calles céntricas de Huauchinangо.

La Fiscalía General del Estado de Puebla infоrmó que por estоs hechos, Eduardо “N”, el padrastro de la menоr, de 55 años, fue detenidо y recluido en el Centrо de Reinserción Social (Ceresо) de este municipio.

Lоs hechos оcurrieron en la vivienda de la víctima, la mujer le pidió al hоy detenido que la “castigara para que aprendiera y nо volviera a llegar a la casa cоn unas cuantas monedas”.
Nо pasaron muchоs minutos para que el padrastrо atendiera el reclamo de la madre y echará agua hirviendо sobre lоs pies de la menor prоvocándоle quemaduras de segundo gradо. Ante los gritоs de la pequeña, algunos vecinоs de la colоnia Chapultepec, donde vivía, llamarоn a la Policía.

Lоs uniformadоs llevaron a la niña al Hоspital General para su atención médica y detuvieron a Eduardо “N”, su padrastro, a quien pusierоn a disposición del Ministeriо Público, iniciándоse la carpeta de investigación 388/2016 por el delitо de violencia familiar en agraviо de una menоr.

Fuente: tuul.tv

La noche del 12 de febrero, Martin Blackwell cogió la olla más grande su casa, la llenó de agua y esperó a que hirviera para lanzarla sobre el hijo de su novia y la pareja de éste. Ahora, ha sido condenado a 40 años de cárcel.

Un hombre de Georgia ha sido condenado a 40 años de cárcel por lanzar una olla de agua hirviendo a una pareja de gays que dormían en su mismo apartamento, provocandoles severas quemaduras.

El jurado ha declarado culpable a Martin Blackwell, de 48 años, de ocho cargos de lesiones con agravantes y dos de asalto con agravantes por su ataque a Anthony Gooden y Marquez Tolbert, ocurrido el pasado mes de febrero.

El juez del condado de Fulton, Henry Newkirk recalcó que Blackwell se había comportado de forma desalmada y maliciosa, ya que “se tarda un buen rato para hervir una olla de agua”.

La fiscal Fani Willis, por su parte, remarcaron que se trató de un ataque premeditado. Según testificó Tolbert, tras lanzarles el agua, Blackwell le agarró mientras se retorcía de dolor y le dijo: “Sal de mi casa con todo ese rollo gay”.

La defensa de Blackwell, por su parte, reconoció los hechos pero alegó que no se trataba de una agresión motivada por el odio sino de una “temeridad”.

“No tiene que ver con el odio. Tiene que ver con la cultura de la vieja escuela, pensamiento anticuado”, dijo la abogada Monique Walker al jurado.

Blackwell permaneció impasible durante todo el juicio y no mostró reacción alguna cuando oyó el veredicto.

Los hechos ocurrieron el pasado 12 de febrero. Blackwell, que trabajaba de camionero, vivía con su novia, Kim Foster, en el apartamento del hermana de ésta. Gooden, que es hijo de Foster, salía con Tolbert desde hacía un mes y esa noche pernoctaban en el apartamento. Ambos estaban durmiendo cuando Blackwell les lanzó el agua.

Tal y como dijo la fiscal, las acciones de Blackwell fueron perfectamente planificadas.

“Cogió la olla más grande de la cocina, la llenó de agua y esperó a que hirviese. Eso le dio el suficiente tiempo para pensar en las consecuencias de lo que iba hacer”, dijo Willis.

 Las consecuencias fueron que ambos sufrieron graves quemaduras que requirieron cirugía e injertos de piel. Gooden, de 24 años, pasó un mes en el hospital, incluyendo dos semanas en coma inducido. Por su parte, Tolbert, de 21 años, estuvo 10 días en el hospital.

Ambos testificaron en el juicio, explicando que, tras el ataque, sufrieron grandes dolores y que eran incapaces de llevar a cabo las tareas más básicas sin la ayuda de los enfermeros del hospital.

“Estoy extático. Creo que se ha hecho justicia”, dijo Tolbert a la prensa tras el veredicto.

Fuente: aldeaviral.com