Solo éxitos cristianos anunciando la venida de Jesucristo

Post Top Ad

Mostrando entradas con la etiqueta origen. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta origen. Mostrar todas las entradas
enero 10, 2017

Predicador afirma que se requiere pagar $60,000 a Cash Luna para traerlo a predicar (Vídeo)

El polémico predicador apologista “de origen judío”, David Diamond, ha declarado abiertamente en un vídeo que se necesitan hasta $ 60,000 dólares para que se presente a predicar en una campaña el popular tele-evangelista de la prosperidad, Carlos [Cash] Luna, pastor de la Iglesia Casa de Dios de Guatemala, que aparece en Enlace Org.

    “… llamen al ministerio. Es más hasta la página de él les voy a dar: www.cashluna.org. Pidan requisitos para traer a Cash Luna, van a ver cuanto les dicen: “60,0000 dólares por campaña. 30,000 por adelantado sino no, no se presenta a actuar, porque ese actúa no predica… Es un actor profesional… Son los que en Colombia se llaman prostitutas prepago, prostituta barata, cobra por predicar, pone precio al mensaje, se prostituye”…

En Noticias del fin, estamos de acuerdo que sí una Iglesia pretende invitar a un pastor a compartir el mensaje o enseñanza durante el tiempo definido, cubra los gastos de transporte de ida y vuelta, estadía completamente con alimentación, y en lo que dependa de su corazón se reciba una ofrenda para el Siervo de Dios que vive por Fe y Espíritu.

Sin embargo, sí un “supuesto” predicador sea apóstol, profeta o cualesquiera de los ministerios haya sido llamado de oficio, exija un salario por predicar aparte de los costos antes mencionados, es indigno y vulgar. (Véase Mateo 10:7-9) Permítanos compartir con ustedes una experiencia personal vivida por el Hno. Roger Casco Herrera de Ministerios ¿Quién es Jesucristo?:

En una de las ocasiones que fue invitado a predicar, al culminar la ministración se le acercó el pastor principal de la iglesia sumamente preocupado. Y le dijo: “hermano Roger, hemos recibido una ministración poderosa, ha sido impactante para todos escuchar así el mensaje puro de la Palabra de Dios basado en nuestro Señor Jesucristo, seguida de señales y milagros como está escrito. Amado, personalmente estoy muy preocupado de cuánto le debemos…” Palabras que fueron infartantes para él, según explica Roger. Él nunca se imaginó que el estrés que manejaba el pastor era cuánto iba a pagar por algo así… Continuó diciendo el pastor “mire siervo, si por casi nada de lo que hemos visto hoy, hemos pagado miles de Lempiras [moneda local hondureña (L)], no imagino cuánto podría costearnos esto”…
He aquí el vídeo del Sr. Diamond:

julio 09, 2016

Director de Instituto de Arqueología de Tel Aviv dice que “El Éxodo no existió”

Israel Finkelstein de 57 años, director del Instituto de Arqueología de la Universidad de Tel Aviv cuestiona el origen divino de los primeros libros del Antiguo Testamento. El Pentateuco “es una genial reconstrucción literaria y política de la génesis del pueblo judío, realizada 1500 años después de lo que siempre creímos”, sostiene.

Añade que esos textos bíblicos son una compilación iniciada durante la monarquía de Josías, rey de Judá, en el siglo VII a.C. En aquel momento, ese reino israelita del Sur comenzó a surgir como potencia regional, en una época en la cual Israel (reino israelita del Norte) había caído bajo control del imperio asirio.

El principal objetivo de esa obra era crear una nación unificada, que pudiera cimentarse en una nueva religión. El proyecto, que marcó el nacimiento de la idea monoteísta, era constituir un solo pueblo judío, guiado por un solo Dios, gobernado por un solo rey, con una sola capital, Jerusalén, y un solo templo, el de Salomón.

En sus trabajos, que han marcado a generaciones de la nueva escuela de la arqueología bíblica, Finkelstein establece una coherencia entre los cinco libros del Pentateuco: el Génesis, el Exodo, el Levítico, los Números y el Deuteronomio.

Los siglos nos han traído esos episodios que relatan la creación del hombre, la vida del patriarca Abraham y su familia -fundadores de la nación judía-, el éxodo de Egipto, la instalación en la tierra prometida y la época de los Reyes.

Según Finkelstein, esos relatos fueron embellecidos para servir al proyecto del rey Josías de reconciliar a los dos reinos israelitas (Israel y Judá) e imponerse frente a los grandes imperios regionales: Asiria, Egipto y Mesopotamia.

En una entrevista realizada por Luisa Corradini del periodico LA NACION de Argentina el habla sobre estas interrogantes.

Durante más de veinte siglos, los hombres creyeron que Dios había dictado las Escrituras a un cierto número de sabios, profetas y grandes sacerdotes israelitas. Así es. Para las autoridades religiosas, judías y cristianas, Moisés era el autor del Pentateuco. Según el Deuteronomio, el profeta lo escribió poco antes de su muerte, en el monte Nebo. Los libros de Josué, de los Jueces y de Samuel eran archivos sagrados, obtenidos y conservados por el profeta Samuel en el santuario de Silo, y los libros de los Reyes venían de la pluma del profeta Jeremías. Así también, David era el autor de los Salmos y Salomón, el de los Proverbios y el del Cantar de los Cantares.

Y sin embargo? Desde el siglo XVII, los expertos comenzaron a preguntarse quién había escrito la Biblia. Moisés fue la primera víctima de los avances de la investigación científica, que planteó cantidad de contradicciones. ¿Cómo es posible -preguntaron los especialistas- que haya sido el autor del Pentateuco cuando el Deuteronomio, el último de los cinco libros, describe el momento y las circunstancias de su propia muerte?

Usted afirma que el Pentateuco fue escrito en una época mucho más reciente. La arqueología moderna nos permite asegurar que el núcleo histórico del Pentateuco y de la historia deuteronómica fue compuesto durante el siglo VII antes de Cristo. El Pentateuco fue una creación de la monarquía tardía del reino de Judá, destinada a propagar la ideología y las necesidades de ese reino. Creo que la historia deuteronómica fue compilada, durante el reino de Josías, a fin de servir de fundamento ideológico a ambiciones políticas y reformas religiosas particulares.

Según la Biblia, primero fue el viaje del patriarca Abraham de la Mesopotamia a Canaán. El relato bíblico abunda en informaciones cronológicas precisas. Es verdad. La Biblia libra una cantidad de informaciones que deberían permitir saber cuándo vivieron los patriarcas. En ese relato, la historia de los comienzos de Israel se desarrolla en secuencias bien ordenadas: los Patriarcas, el Exodo, la travesía del desierto, la conquista de Canaán, el reino de los Jueces, el establecimiento de la monarquía. Haciendo cálculos, Abraham debería de haber partido hacia Canaán unos 2100 años antes de Cristo.

¿Y no es así? No. En dos siglos de investigación científica, la búsqueda de los patriarcas nunca dio resultados positivos. La supuesta migración hacia el Oeste de tribus provenientes de la Mesopotamia, con destino a Canaán, se reveló ilusoria. La arqueología ha probado que en esa época no se produjo ningún movimiento masivo de población. El texto bíblico da indicios que permiten precisar el momento de la composición final del libro de los Patriarcas. Por ejemplo, la historia de los patriarcas está llena de camellos. Sin embargo, la arqueología revela que el dromedario sólo fue domesticado cuando se acababa el segundo milenio anterior a la era cristiana y que comenzó a ser utilizado como animal de carga en Medio Oriente mucho después del año 1000 a.C. La historia de José dice que la caravana de camellos transporta “goma tragacanto, bálsamo y láudano”. Esa inscripción corresponde al comercio realizado por los mercaderes árabes bajo control del imperio asirio en los siglos VIII y VII a.C. Otro hecho anacrónico es la primera aparición de los filisteos en el relato, cuando Isaac encuentra a Abimelech, rey de los filisteos. Esos filisteos -grupo migratorio proveniente del mar Egeo o de Asia Menor- se establecieron en la llanura litoral de Canaán a partir de 1200 a.C. Esos y otros detalles prueban que esos textos fueron escritos entre los siglos VIII y VII a.C.

El heroísmo de Moisés frente a la tiranía del faraón, las diez plagas de Egipto y el éxodo masivo de israelitas hacia Canaán son algunos de los episodios más dramáticos de la Biblia. ¿También eso es leyenda? Según la Biblia, los descendientes del patriarca Jacob permanecieron 430 años en Egipto antes de iniciar el éxodo hacia la Tierra Prometida, guiados por Moisés, a mediados del siglo XV a.C. Otra posibilidad es que ese viaje se haya producido dos siglos después. Los textos sagrados afirman que 600.000 hebreos cruzaron el Mar Rojo y que erraron durante 40 años por el desierto antes de llegar al monte Sinaí, donde Moisés selló la alianza de su pueblo con Dios. Sin embargo, los archivos egipcios, que consignaban todos los acontecimientos administrativos del reino faraónico, no conservaron ningún rastro de una presencia judía durante más de cuatro siglos en su territorio. Tampoco existían, en esas fechas, muchos sitios mencionados en el relato. Las ciudades de Pitom y Ramsés, que habrían sido construidas por los hebreos esclavos antes de partir, no existían en el siglo XV a.C. En cuanto al Exodo, desde el punto de vista científico no resiste el análisis.

¿Por qué? Porque, desde el siglo XVI a.C., Egipto había construido en toda la región una serie de fuertes militares, perfectamente administrados y equipados. Nada, desde el litoral oriental del Nilo hasta el más alejado de los pueblos de Canaán, escapaba a su control. Casi dos millones de israelitas que hubieran huido por el desierto durante 40 años tendrían que haber llamado la atención de esas tropas. Sin embargo, ni una estela de la época hace referencia a esa gente. Tampoco existieron las grandes batallas mencionadas en los textos sagrados. La orgullosa Jericó, cuyos muros se desplomaron con el sonar de las trompetas de los hebreos, era entonces un pobre caserío. Tampoco existían otros sitios célebres, como Bersheba o Edom. No había ningún rey en Edom para enfrentar a los israelitas. Esos sitios existieron, pero mucho tiempo después del Exodo, mucho después de la emergencia del reino de Judá. Ni siquiera hay rastros dejados por esa gente en su peregrinación de 40 años. Hemos sido capaces de hallar rastros de minúsculos caseríos de 40 o 50 personas. A menos que esa multitud nunca se haya detenido a dormir, comer o descansar: no existe el menor indicio de su paso por el desierto.

En resumen, los hebreos nunca conquistaron Palestina. Nunca. Porque ya estaban allí. Los primeros israelitas eran pastores nómadas de Canaán que se instalaron en las regiones montañosas en el siglo XII a.C. Allí, unas 250 comunidades muy reducidas vivieron de la agricultura, aisladas unas de otras, sin administración ni organización política. Todas las excavaciones en la región exhumaron vestigios de poblados con silos para cereales, pero también de corrales rudimentarios. Esto nos lleva a pensar que esos individuos habían sido nómadas que se convirtieron en agricultores. Pero ésa fue la tercera ola de instalación sedentaria registrada en la región desde el 3500 a.C. Esos pobladores pasaban alternativamente del sedentarismo al nomadismo pastoral con mucha facilidad.

¿Por qué? Ese tipo de fluctuación era muy frecuente en Medio Oriente. Los pueblos autóctonos siempre supieron operar una rápida transición de la actividad agrícola a la pastoral en función de las condiciones políticas, económicas o climáticas. En este caso, en épocas de nomadismo, esos grupos intercambiaban la carne de sus manadas por cereales con las ricas ciudades cananeas del litoral. Pero cuando éstas eran víctimas de invasiones, crisis económicas o sequías, esos pastores se veían forzados a procurarse los granos necesarios para su subsistencia y se instalaban a cultivar en las colinas. Ese proceso es el opuesto al que relata la Biblia: la emergencia de Israel fue el resultado, no la causa, del derrumbe de la cultura cananea.

Pero entonces, si esos primeros israelitas eran también originarios de Canaán, ¿cómo identificarlos? Los pueblos disponen de todo tipo de medios para afirmar su etnicidad: la lengua, la religión, la indumentaria, los ritos funerarios, los tabúes alimentarios. En este caso, la cultura material no propone ningún indicio revelador en cuanto a dialectos, ritos religiosos, formas de vestirse o de enterrar a los muertos. Hay un detalle muy interesante sobre sus costumbres alimentarias: nunca, en ningún poblado israelita, fueron exhumados huesos de cerdo. En esa época, los primeros israelitas eran el único pueblo de esa región que no comía cerdo.

¿Cuál es la razón? No lo sabemos. Quizá los protoisraelitas dejaron de comer cerdo porque sus adversarios lo hacían en profusión y ellos querían ser diferentes. El monoteísmo, los relatos del Exodo y la alianza establecida por los hebreos con Dios hicieron su aparición mucho más tarde en la historia, 500 años después. Cuando los judíos actuales observan esa prohibición, no hacen más que perpetuar la práctica más antigua de la cultura de su pueblo verificada por la arqueología.

En el siglo X a.C. las tribus de Israel formaron una monarquía unificada -el reino de Judá- bajo la égida del rey David. David y su hijo, Salomón, servirán de modelo a las monarquías de Occidente. ¿Tampoco ellos fueron lo que siempre se creyó? Tampoco en este caso la arqueología ha sido capaz de encontrar pruebas del imperio que nos legó la Biblia: ni en los archivos egipcios ni en el subsuelo palestino. David, sucesor del primer rey, Saúl, probablemente existió entre 1010 y 970 a.C. Una única estela encontrada en el santuario de Tel Dan, en el norte de Palestina, menciona “la casa de David”. Pero nada prueba que se haya tratado del conquistador que evocan las Escrituras, capaz de derrotar a Goliat. Es improbable que David haya sido capaz de conquistas militares a más de un día de marcha de Judá. La Jerusalén de entonces, escogida por el soberano como su capital, era un pequeño poblado, rodeado de aldeas poco habitadas. ¿Dónde el más carismático de los reyes hubiera podido reclutar los soldados y reunir el armamento necesarios para conquistar y conservar un imperio que se extendía desde el Mar Rojo, al Sur, hasta Siria, al Norte? Salomón, constructor del Templo y del palacio de Samaria, probablemente tampoco haya sido el personaje glorioso que nos legó la Biblia.

¿Y de dónde salieron sus fabulosos establos para 400.000 caballos, cuyos vestigios sí se han encontrado? Fueron criaderos instalados en el Sur por el reino de Israel varios decenios más tarde. A la muerte de Salomón, alrededor del 933 a.C., las tribus del norte de Palestina se separaron del reino unificado de Judá y constituyeron el reino de Israel. Un reino que, contrariamente a lo que afirma la Biblia, se desarrolló rápido, económica y políticamente. Los textos sagrados nos describen las tribus del Norte como bandas de fracasados y pusilánimes, inclinados al pecado y a la idolatría. Sin embargo, la arqueología nos da buenas razones para creer que, de las dos entidades existentes, la meridional (Judá) fue siempre más pobre, menos poblada, más rústica y menos influyente. Hasta el día en que alcanzó una prosperidad espectacular. Esto se produjo después de la caída del reino nórdico de Israel, ocupado por el poderoso imperio asirio, que no sólo deportó hacia Babilonia a los israelitas, sino que además instaló a su propia gente en esas fértiles tierras.

¿Fue, entonces, durante el reino de Josías en Judá cuando surgió la idea de ese texto que se transformaría en fundamento de nuestra civilización occidental y origen del monoteísmo? Hacia fines del siglo VII a.C. hubo en Judá un fermento espiritual sin precedente y una intensa agitación política. Una coalición heteróclita de funcionarios de la corte sería responsable de la confección de una saga épica compuesta por una colección de relatos históricos, recuerdos, leyendas, cuentos populares, anécdotas, predicciones y poemas antiguos. Esa obra maestra de la literatura -mitad composición original, mitad adaptación de versiones anteriores- pasó por ajustes y mejoras antes de servir de fundamento espiritual a los descendientes del pueblo de Judá y a innumerables comunidades en todo el mundo.

El núcleo del Pentateuco fue concebido, entonces, quince siglos después de lo que creíamos. ¿Sólo por razones políticas? ¿Con el fin de unificar los dos reinos israelitas? El objetivo fue religioso. Los dirigentes de Jerusalén lanzaron un anatema contra la más mínima expresión de veneración de deidades extranjeras, acusadas de ser el origen de los infortunios que padecía el pueblo judío. Pusieron en marcha una campaña de purificación religiosa, ordenando la destrucción de los santuarios locales. A partir de ese momento, el templo que dominaba Jerusalén debía ser reconocido como único sitio de culto legítimo por el conjunto del pueblo de Israel. El monoteísmo moderno nació de esa innovación.

Fuente: Agencia Orbita
mayo 03, 2016

Los evangélicos de origen africano luchan para que las autoridades los respeten

El espíritu optimista de los evangélicos africanos se está moviendo por los arenosos suburbios de las principales ciudades francesas, especialmente en el cordón de decadentes localidades alrededor del este de París, incluyendo a Montreuil

Apenas conocidas hace 20 años, estas iglesias de inmigrantes están lentamente haciéndose un lugar en el paisaje religioso de Francia. Pero, se enfrentan con obstáculos de funcionarios locales y quejas de parte de los vecinos.

DAÑO COLATERAL

Existen 1,1 millones de protestantes en este país tradicionalmente católico de 60 millones de habitantes. Alguna vez luteranos y reformistas, los evangélicos son ahora más de un tercio de los protestantes, gracias en parte a la reciente llegada de inmigrantes africanos, haitianos y asiáticos.

Unas 250 “iglesias étnicas” funcionan tan sólo en las afueras de París, acogiendo a 36.000 evangélicos de raza negra. Muchos provienen de la República Democrática del Congo, antiguamente llamada Zaire, pero también de Camerún, Costa de Marfil y otros países africanos.

A menudo los propios funcionarios que les tratan saben poco acerca de las denominaciones protestantes y a veces sospechan que cualquier cosa diferente al catolicismo puede ser una secta peligrosa. A ello sin duda ayudó que las desconocidas iglesias étnicas colmaron los titulares a comienzos de 2004 cuando dos publicaciones describieron a los evangélicos como “los aliados de Bush” y como “una secta que quiere conquistar el mundo.”

El reverendo Jean-Arnold de Clermont, director de la Federación Protestante Francesa, dijo que los evangélicos eran “víctimas del daño colateral” de la confrontación entre Francia y su gran minoría musulmana, y de la hostilidad francesa para con la administración Bush.

“DEBEMOS CANTAR Y BAILAR”

Castanou dijo que los funcionarios locales eran más amables con la minoría musulmana, que con seis millones de fieles cuenta con mucha más influencia política que los pequeños grupos de inmigrantes.

Pastores como Castanou tampoco pueden alquilar salones para sus cultos, dada la creciente molestia de los vecinos, que se oponen a la música alta los domingos por la mañana.

El caso de acoso más famoso ocurrió una mañana de febrero pasado del 2005, cuando el alcalde comunista de Montreuil irrumpió en los servicios dominicales de seis iglesias negras solicitando llevar adelante inspecciones de seguridad en el lugar. Evacuó a cuatro de ellas.

Fuente: Protestantedigital.com
febrero 15, 2016

El cura acusado de matar a una reina de belleza hace 56 años

En abril de 1960, la mujer de origen mexicano salió de su casa en Estados Unidos para ir a confesarse y nunca regresó

"Primero pensé que era un saco flotando. Después me di cuenta de que era el cadáver de una joven". Esa fue la declaración que le hizo a la agencia de noticias AP, W.Arnold, el hombre que descubrió en Texas, Estados Unidos, el cuerpo de Irene Garza el 21 de abirl de 1960.

Garza, una maestra de primaria de 25 años y reina de belleza, había desaparecido seis días antes.

Según las autoridades, la joven había visitado ese día la iglesia católica del Sagrado Corazón, en la ciudad texana de McAllen. Planeaba confesarse. Y nunca regresó a su casa.

La autopsia reveló que la mujer fue violada, golpeada, asfixiada y arrojada a un canal de irrigación.

Esta semana, después de una lucha infatigable de casi seis décadas de su familia para encontrar al responsable, las autoridades finalmente llevaron a cabo un arresto vinculado al asesinato: el sacerdote que aparentemente escuchó la última confesión de Irene Garza.
 Garza fue Miss Sur de Texas en 1958 y la primera majorette hispana en su colegio. (Foto: AP)

John Feit era el sacerdote que servía temporalmente en la parroquia y durante mucho tiempo fue el único sospechoso del asesinato.

Este miércoles el hombre de 83 años, ahora retirado del sacerdocio, apareció en una corte de Phoenix un día después de ser arrestado en su casa en Scottsdale, Arizona, acusado del asesinato.

"El arresto de John Feit es el primer paso para administrar justicia por el asesinato de la señorita Irene Garza" declaró Ricardo Rodríguez, el fiscal de distrito del condado de Hidalgo.

"Después de casi 56 años, la familia de Garza y nuestra comunidad finalmente veremos que se imparte la justicia", agregó.

"Belleza e inteligencia"

Cuando desapareció los medios describieron a la mexicano-estadounidense, como "una belleza de cabello oscuro" y "profundamente religiosa".

El diario Sarasota Journal informó en esa época que Garza se presentaba con frecuencia a los concursos de belleza y que en 1958 había sido coronada Miss Sur de Texas.

El ex sacerdote John Feit fue detenido. (Foto: Reuters)

"Tenía una encantadora combinación de belleza e inteligencia y, en su corta vida, reunió una colección de logros y primicias: fue la primera majorette (bastonera) hispana en una secundaria de mayoría anglosajona cerca de la frontera de Texas y México, y la primera de su familia que logró ir a la universidad", explicaba el diario New York Times.

El asesinato causó conmoción durante la época y John Feit, que entonces tenía 27 años, fue sujeto a varias investigaciones durante años, incluido un interrogatorio ante un gran jurado en el 2004 que concluyó que no había suficiente evidencia para acusarlo.

Las autoridades no informaron esta semana sobre qué tipo de pruebas reunieron para finalmente poder acusarlo.

Principal sospechoso

El sacerdote estuvo bajo sospecha desde el principio, cuando le dijo a la policía que había escuchado la confesión de Garza el día que desapareció.

Entonces declaró que había llevado a cabo la confesión en la rectoría (la casa del párroco) y no en el confesionario. Pero negó haberla asesinado.

Durante la investigación no se encontraron testigos y cualquier evidencia que pudo haber existido, desapareció en el canal.

"Simplemente no tenemos una pista convincente en este momento", le dijo Clint Mussey, jefe de la policía de McAllen, al diario The Ocala Star-Banner el 22 de abril de 1960.

Pero las sospechas de Feit se intensificaron cuando semanas después cuando una estudiante de 20 años contactó a la policía alegando que Feit la había atacado tres semanas antes de que Garza muriera.

El asesinato causó conmoción cuando ocurrió. (Foto: Victoria Advocate)

Según informó The Times-News, el ataque había ocurrido en Edinburg, una localidad a unos 16 km de McAllen.

La estudiante declaró que el sacerdote la había acosado por la espalda y colocado un pañuelo en la boca, pero que logró huir de la escena tras morderle un dedo.

Aunque Feint nuevamente volvió a negar cualquier participación en el hecho, fue arrestado en agosto de 1960 y acusado de asalto con intención de cometer violación.

Un año después el caso fue llevado a juicio pero Feint decidió no impugnar los cargos de asalto agravado y recibió una multa de US$500. Nunca cumplió una condena en la cárcel.

"Estábamos acusando a un sacerdote y en esos días los sacerdotes eran infalibles", le dijo a la cadena CNN Lynda De La Viña, la prima de Garza, que en el momento del asesinato tenía 9 años.

Justicia

Feit siguió con su vida. Y a pesar de las sospechas en su contra la Iglesia Católica decidió trasladarlo a un monasterio en Missouri y después a un convento en Nuevo México donde, según informaron los medios, ayudaba en el asesoramiento de sacerdotes "con problemas".

En los 1970 Feit dejó el sacerdocio, se casó y tuvo tres hijos.

Rehizo su vida en Phoenix, Arizona, tuvo una participación activa en la parroquia local y trabajó 17 años como voluntario de una organización de caridad.

La familia de Irene Garza, sin embargo, nunca se rindió. Y fue gracias a la presión que nunca dejaron de ejercer que en el 2014 el asesinato volvió a ser motivo de titulares.

Ricardo Rodríguez Jr., candidato ese año para el cargo de fiscal de distrito en el Condado de Hidalgo, una localidad en la frontera de Texas con México, prometió reevaluar la evidencia del caso.

Rodríguez ganó la elección. Y tal como lo había prometido, revisó el caso.

Hace unos días un gran jurado convocado por el nuevo fiscal de distrito votó a favor de imputar a John Feit por la muerte de Irene Garza.

El ex sacerdote está encarcelado, con una fianza de US$750.000, mientras espera ser transferido a Texas.

Fuente: http://elcomercio.pe